Durante el transcurso de la Fiesta del cine (28, 29 y 30 de octubre) nos pasamos por una sala ubicada en nuestra ciudad para ver en pantalla grande Parásitos, último largometraje del director y guionista surcoreano Bong Joon Ho.
Toda la familia de Ki-taek está en el paro y se interesa mucho por el tren de vida de la riquísima familia Park. Un día, su hijo logra que le recomienden para dar clases particulares de inglés en casa de los Park. Es el comienzo de un engranaje incontrolable, del cual nadie saldrá realmente indemne.
Bong Joon ho (Memories of murder, Snowpiercer) nos propone una comedia negra que va mutando a otros géneros de forma constante. Esa transición es llevada con maestría, sin fisuras y con un entreteniendo a prueba de bombas. Ahora podemos comprender que haya obtenido tanto reconocimiento por su paso en los cines de multitud de países y ganado premios importantes como la Palma de Oro del Festival de Cannes 2019
Todo este esplendor no sería posible sin esos espacios donde transcurre la historia: Una casa moderna llena de lujos situada en un lugar privilegiado y un semisótano de mala muerte en un barrio de clase baja. Dos lugares llenos de contrastes, pero unidos por unos personajes con ambiciones, ideas y formas de vivir completamente opuestas. La fotografía de Hong Kyung-Pyo y la música compuesta por Jung Jae Il encajan perfectamente, dando mayor riqueza y empaque a una obra por sí misma sublime.
Parásitos es la obra más redonda y cautivadora del presente año. Dirigida de forma espléndida e interpretada magistralmente por un reparto espectacular. Un cine con mayúsculas que vuelve a demostrar la potencia cinematográfica que tiene el cine venido desde Corea del sur.
Lo mejor: Crítica contundente a la diferencia de clases sociales y a la desigualdad de las mismas en la sociedad actual. Posee un ritmo que nunca decae. Muy bien interpretada. Historia cautivadora que te mantiene pegado a la butaca. Buena ración de sorpresas. Verla en una sala de cine llena con un público atento es una experiencia enriquecedora.
Lo peor: Alguna que otra situación poco creíble en su recta final.
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